El mexicano Salvador Carmona, expulsado de por vida del fútbol por dopaje, aseguró que directivos de la Federación Mexicana, a los que no identificó, lo obligaron a jugar en la Copa Confederaciones del 2005, pese a que sabían que estaba bajo los efectos de una sustancia prohibida.
"Ellos me alinearon y tenía que acatar órdenes. Todos sabían (del consumo de un suplemento no permitido), se me pidió que jugara y, como profesional lo hice", dijo Carmona a la prensa local al aludir al partido que el 'Tri' jugó contra Brasil el 19 de junio del 2005.
Demandó a la Federación Mexicana de Fútbol por daños y prejuicios en el 2008 y el 18 de octubre pasado las autoridades fallaron en contra del jugador.
El abogado de Carmona anunció que ha presentado una apelación contra el fallo y dijo estar confiado en que el Tribunal le dará la razón, aunque mostró temor ante posibles represalias contra su cliente. "Podría peligrar la integridad de Salvador con un comentario que pudiera afectar a gente tan poderosa", afirmó el abogado, David Cohen.
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